Una de las preguntas más comunes que surgen cuando se inicia un tratamiento de implantología es cuánto dura un implante dental.
La respuesta te la damos en este artículo: conocerás su duración estimada, qué factores influyen en su longevidad, y algunos consejos para prolongar su vida útil.
¿Cuánto tiempo dura un implante dental?
La implantología ha evolucionado de forma brutal en los últimos años. Los avances científicos y tecnológicos han hecho que este tratamiento cada vez sea más sencillo de realizar y, además, con una rotunda tasa de éxitos.
Cada día surgen nuevas técnicas como tener tu implante de carga inmediata (en un solo día), superar la falta de calidad o cantidad de hueso con injertos o implantes cigomáticos, y así un largo etcétera. Estos progresos también hacen que la durabilidad de los implantes sea cada vez mayor.
La vida media de los implantes dentales oscila entre los 15 y los 25 años. No obstante, este intervalo puede variar según las circunstancias del paciente y otros factores a tener en cuenta.
Diversos estudios científicos reflejan que el 80 % de los implantes dentales duran más de 20 años, aunque se ha evidenciado que su funcionalidad puede extenderse hasta más de 35 años.
En términos generales se estima que más del 90% de los implantes colocados tienen una tasa de éxito que supera la década.
Estos porcentajes aumentan en las clínicas dentales que siguen rigurosos estándares de calidad y limpieza. Pero la verdadera clave de su durabilidad está en la higiene y en los hábitos del paciente.
Elementos claves de un implante dental
Los implantes dentales son raíces artificiales que se anclan al hueso y se fabrican con titanio. Esta “raíz” se fusiona con la estructura ósea mediante un proceso que se llama osteointegración.
Esta fusión puede perdurar mientras el hueso de la mandíbula permanezca intacto, lo que puede ser durante toda la vida del paciente.
Para ello es importante que se le dé el cuidado correcto y que la persona acuda a sus revisiones dentales regularmente, como mínimo dos veces al año.
Una vez completada la osteointegración, se procede a colocar una corona o prótesis final sobre el implante, que es la porción que se ve en la boca.
Por tanto, hay tres elementos claves en un implante que pueden condicionar su durabilidad: el material, la calidad del hueso, y la corona.
El material: titanio
El material más habitual en los implantes es el titanio (aunque también se utiliza el circonio).
El titanio es un metal muy ligero, resistente y biocompatible, de forma que facilita el proceso de osteointegración. También es conocido por su resistencia a la oxidación, lo que significa que no se deteriora con el paso del tiempo.
La calidad del hueso
La densidad y calidad del hueso en el que se inserta el implante son fundamentales.
Si el hueso es débil o se atrofia con el tiempo, afectará a la estabilidad del mismo.
La condición de los huesos maxilares puede deteriorarse debido a la edad y a otros factores, como las enfermedades de las encías u otras afecciones subyacentes.
Por suerte, en la actualidad contamos con métodos que permiten regenerar el hueso previo a la instalación del implante.
La corona dental
La corona es la pieza que se coloca sobre el implante reemplazando la corona dentaria natural. Con el paso del tiempo y del desgaste es posible que haya que sustituirla como parte del mantenimiento.
Aunque duran menos que los implantes pueden alcanzar los 10 y 15 años. De hecho, con una higiene bucal óptima, es posible que se conserve aún más tiempo.
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¿Qué factores determinan la duración del implante dental?
Ahora que ya sabes cuánto dura un implante dental, te mostramos algunos de los factores que determinan su duración, aunque ya puedes intuirlos, pero veámoslos en detalle.
1. Calidad del material del implante
El tipo de material y su calidad puede influir en la durabilidad del implante.
El titanio es el material por excelencia: resistente, duradero y biocompatible.
2. Técnica quirúrgica
Una correcta colocación y técnica durante la cirugía es esencial para el éxito a largo plazo del implante.
Para ello, es vital que te pongas en manos de buenos profesionales, que estudien tu caso de forma personalizada para determinar el diagnóstico y tratamiento más óptimo.
3. Higiene oral
La durabilidad del implante está vinculada por completo a los cuidados que el paciente le dé.
Si no se mantiene una limpieza adecuada, las bacterias proliferan alrededor del implante, generando una inflamación en la membrana mucosa circundante, conocida como mucositis.
Si la mucositis no se atiende, puede evolucionar a periimplantitis, una afección todavía más grave.
En esta situación, además de la inflamación, hay pérdida de hueso alrededor del diente comprometido. El resultado de la periimplantitis es el desgaste óseo: el implante puede perder su anclaje en el hueso y desplazarse.
Del mismo modo, es fundamental que asistas a revisiones dentales de forma regular.
4. Estilo de vida del paciente
Hábitos como fumar o consumir alcohol en exceso afectan negativamente a la durabilidad del implante. Los efectos nocivos del tabaquismo se manifiestan aquí también.
5. Enfermedades sistémicas y carga masticatoria
Condiciones como la diabetes no controlada, o el cáncer pueden afectar a la capacidad del cuerpo para sanar y, por lo tanto, la duración del implante.
Por otro lado, una sobrecarga constante o maloclusión dental puede generar presiones indebidas sobre el implante, provocando microfracturas que mermen su longevidad.
6. Rechazo del implante
En ciertas ocasiones, el cuerpo puede rechazar el implante, lo que afectaría su duración. Puede ser debido a un proceso infeccioso o problemas con la osteointegración.
En este sentido, una infección no tratada alrededor del implante, como la periimplantitis, puede comprometer la duración del mismo.
7. Calidad de la corona
La corona dental, generalmente de cerámica o porcelana, está hecha de materiales altamente resistentes que pueden aguantar impactos y presiones intensas.
A pesar de que se pueden reemplazar con facilidad, con un mantenimiento adecuado, una corona puede tener una vida útil muy prolongada.
¿Cómo prolongar la vida de un implante dental?
Ya conoces el secreto para que un implante dure toda la vida: tener una higiene bucodental óptima y acudir con regularidad a las revisiones de tu dentista.
1. Prioriza una limpieza dental de calidad
Usa herramientas como cepillos interproximales y asegúrate de limpiar las coronas como lo harías con tus dientes naturales. Tienes que cuidarlos igual. Al fin y al cabo, cada diente ayuda a mantener la estructura y salud de los demás, sea natural o no.
Para conservar los implantes dentales en óptimas condiciones, el cepillado regular es esencial.
Complementar la rutina de limpieza con el uso de hilo dental o un irrigador, junto con enjuagues bucales adecuados, potenciará la durabilidad de tus implantes.
2. Evita el tabaco y limita el alcohol
El tabaquismo es un factor clave en el rechazo de los implantes.
Abandonar este hábito o minimizarlo es esencial para maximizar la longevidad de los mismos. Además, es recomendable limitar el consumo de alcohol a ocasiones especiales.
3. Usa tus dientes adecuadamente
No utilices los dientes para abrir cosas o aplicar fuerza, ya que podrías causar un daño interno o incluso perder el implante.
Limita también el consumo de alimentos muy duros para evitar un desgaste prematuro o daño.
4. Mantén a raya el estrés
El bruxismo, que a menudo es resultado del estrés, puede dañar las estructuras bucales, afectando a la corona y al implante.
Conclusión
Los implantes dentales es uno de los tratamientos más longevos, sin embargo, su duración dependerá de diferentes factores y circunstancias. Aunque si realmente quieres darle una larga y próspera vida, la higiene bucal y acudir periódicamente a tu dentista es el secreto.
¿Tienes alguna duda más sobre cuánto dura un implante dental?
Ponte en contacto con nosotros o ven a visitarnos a nuestra clínica dental en Barcelona.
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